Hay varios factores que pueden influir en la comisión que cobra un agente inmobiliario. Comprenderlos puede ayudarle a tomar decisiones con conocimiento de causa y a negociar un mejor acuerdo.
Ubicación y condiciones del mercado
La ubicación de la propiedad y las condiciones del mercado desempeñan un papel importante a la hora de determinar las comisiones. En zonas de gran demanda o durante un mercado de vendedores, los agentes pueden cobrar comisiones más altas debido a la mayor competencia entre los compradores. Por el contrario, en un mercado de compradores o en lugares menos deseados, las comisiones pueden ser más bajas.
Clima económico
El clima económico general puede influir en las comisiones. Durante las recesiones económicas, las transacciones inmobiliarias pueden disminuir, lo que lleva a los agentes a ajustar sus tarifas de comisiones para atraer a más clientes.
Propiedades especiales
Las propiedades singulares, como las casas históricas o las que tienen características arquitectónicas únicas, también pueden afectar al porcentaje de comisión. El esfuerzo añadido para comercializar y vender tales propiedades podría justificar una comisión más alta.
Cómo se reparten las comisiones entre las partes
Las transacciones inmobiliarias pueden implicar a varias partes, y la comisión suele dividirse entre ellas. Entender cómo funcionan estos repartos puede aclarar qué porcentaje se llevan los agentes inmobiliarios y cómo afecta a sus ingresos.
Reparto entre agente inmobiliario y agencia
En la mayoría de los casos, la comisión se divide entre el agente de la propiedad inmobiliaria y el agente del comprador. Sin embargo, la cosa no acaba ahí. Ambos agentes suelen trabajar para una agencia inmobiliaria que también se lleva una parte de la comisión. El reparto entre el agente y la agencia puede variar, oscilando normalmente entre el 50/50 y el 70/30, en función de la experiencia del agente, su trayectoria y el acuerdo con su empleador.
Agentes con experiencia frente a agentes nuevos
Los agentes con experiencia que tienen un historial probado de ventas exitosas y una sólida base de clientes pueden negociar mejores repartos con sus corredores, quedándose a veces con hasta el 80% o más de la comisión. Los nuevos agentes, por el contrario, pueden recibir un porcentaje menor hasta que se consoliden en el sector.