Zonas populares para comprar propiedades en las Islas Baleares
Las Islas Baleares tienen cada una su atractivo, pero Mallorca es la más grande y versátil. Elegir la ubicación adecuada en la isla depende de sus objetivos.
Palma de Mallorca
La capital es vibrante, histórica y moderna a la vez. Entre las zonas más populares se encuentran Santa Catalina, La Lonja y Portixol. Los compradores suelen sentirse atraídos por los elegantes apartamentos y áticos con terraza. Palma ofrece una excelente demanda de alquiler durante todo el año, lo que la hace muy atractiva para los inversores.
Son Vida
Este exclusivo barrio situado en una colina con vistas a Palma es famoso por sus campos de golf y sus lujosas villas. A menudo comparado con Beverly Hills, Son Vida atrae a personas con un alto poder adquisitivo que buscan privacidad, seguridad y vistas panorámicas.
Suroeste de Mallorca
Esta región, que incluye Puerto Portals, Bendinat, Santa Ponsa y Port d'Andratx, alberga las propiedades más lujosas de la isla. Aquí predominan las villas con vistas al mar, los apartamentos en primera línea y las comunidades cerradas. La zona también cuenta con puertos deportivos y boutiques de diseño, lo que garantiza un gran atractivo para los compradores internacionales.
Centro de Mallorca
Para aquellos que buscan espacio y autenticidad, las localidades del centro, como Alaró, Binissalem y Santa María, son ideales. Las propiedades aquí suelen incluir fincas con terreno, viñedos o vistas a la montaña. El precio por metro cuadrado es significativamente más bajo que en las zonas costeras, lo que ofrece una buena relación calidad-precio.
Norte de Mallorca
Pollença y Alcúdia son las favoritas de las familias. Ofrecen encantadores cascos antiguos, acceso a algunas de las mejores playas de la isla y un estilo de vida relajado pero sofisticado. Las propiedades aquí tienden a mantener bien su valor, especialmente las que están cerca de la costa.
Pueblos de la Tramuntana
Pueblos como Deià, Sóller y Valldemossa atraen a artistas, escritores y a aquellos que buscan el auténtico encanto mallorquín. Las casas de piedra con vistas a la montaña son la norma. En estas zonas, lo importante no es tanto el rendimiento del alquiler como la inversión en estilo de vida.